¿Se te ocurre un plato más apetecible y versátil que los crepes? Los puedes tomar con infinidad de combinaciones dulces y saladas e incluso darles diferentes formas, como triángulos, rollitos o medias lunas. Aunque su elaboración es sencilla, el secreto de su éxito y lo que marcará la diferencia reside en obtener una buena masa. Para ahorrar tiempo y energía, lo más eficiente es recurrir a una batidora portátil de Nutribullet, con una potencia y un rendimiento de alta calidad que permite que los diferentes ingredientes queden perfectamente mezclados y tengan la proporción perfecta.
- 1 taza de harina de trigo (110 g)
- 2 huevos
- 1 taza de leche (250 ml)
- 1/2 taza de agua (125 ml)
- 2 cucharadas de mantequilla (30 g)
- 1 pizca de sal
- Ralladura de limón (opcional)
- 1 cucharadita de azúcar (opcional, si te apetece un toque más dulce)
El tiempo total de preparación para la masa de crepes es de 10 minutos, contando con la preparación de los ingredientes y la mezcla de la masa, en la que se baten los ingredientes hasta que esté suave y sin grumos.
Y en cuanto a la cocción de cada crepe en la sartén, el tiempo estimado es de 2-3 minutos.
El proceso para preparar tus crepes favoritos es muy divertido y su sencillez lo convierte en una actividad perfecta para realizar con niños. Los pasos a seguir son:
1. Preparar la masa de crepes: empieza mezclando los ingredientes líquidos. En un bol grande, bate los huevos. Luego, añade la leche (que puede ser de cualquier tipo), el agua y la mantequilla derretida. Mezcla bien hasta que estén bien ligados. Lo siguiente es añadir los ingredientes secos. Tamiza la harina sobre la mezcla líquida para evitar grumos y agrega la pizca de sal y el azúcar, si has elegido usarlo. Mezcla bien con tu batidora Nutribullet hasta obtener una masa suave y homogénea; la batidora Nutribullet Portable también es perfecta para esta receta. Y de manera opcional, puedes dejar reposar la masa durante 30-60 minutos en la nevera si quieres conseguir un extra de suavidad.
2. Cocinar los crepes: calienta una sartén antiadherente a fuego medio. Si la sartén o la crepera (puedes usar ambas) no es antiadherente, engrásala ligeramente con un poco de mantequilla o aceite y usa un papel de cocina para retirar el exceso. A continuación, vierte aproximadamente 1/4 de taza de masa en el centro de la sartén caliente. Inclina la sartén rápidamente en todas las direcciones para que la masa se extienda de manera uniforme por toda la superficie de la sartén. Una vez hecho esto, reduce ligeramente la temperatura y cocínala durante 1-2 minutos, hasta que los bordes del crepe comiencen a dorarse y el centro esté seco. Usa una espátula fina para levantar y dar la vuelta, con cuidado de no romper la masa. Por último, cocínala por el otro lado durante unos 30-60 segundos. Deposítala en un plato y repite el proceso con el resto de la masa, engrasando la sartén ligeramente si es necesario. Para que mantengan el calor y no se sequen, es importante tapar los crepes con un paño.
3. Servir: coloca los crepes en un plato y rellénalos con tus ingredientes favoritos, ya sean dulces o salados. Puedes doblarlas en triángulos, enrollarlas o incluso doblarlas por la mitad.
Ahora que tienes tus crepes listos, el siguiente paso es buscar el acompañamiento perfecto. Como los crepes son tan versátiles, las opciones tanto dulces como saladas son muy amplias. Nuestras 5 favoritas son:
1. Con frutas y miel: elige frutas frescas como fresas, plátanos, arándanos o manzanas caramelizadas y añade miel para aportar un toque dulce natural. Incluso puedes optar por yogur griego o crema batida para un extra de cremosidad.
2. Con mantequilla de maní y plátano: extiende una capa de mantequilla de maní sobre el crepe, agrega rodajas de plátano y espolvorea con un poco de azúcar glass y nuez moscada.
3. Con mermelada y queso crema: unta una capa de queso crema en el crepe y añade tu mermelada favorita, por ejemplo, de fresa, melocotón o frutos rojos. Por último, espolvorea con nuez moscada o canela si quieres un toque más especial de sabor.
4. Con jamón y queso: si eres más de saludo, coloca una loncha de jamón y otra de queso (mozzarella, cheddar o havarti) en el crepe.
5. Con espinacas y champiñones: rellena el crepe con una mezcla de espinacas salteadas y champiñones. Añade queso feta o parmesano rallado además de un poco de ajo y aceite de oliva para un sabor más intenso.
La masa para crepes se puede guardar en la nevera y mantenerse en perfecto estado de 2 a 3 días. Eso sí, siempre en un recipiente hermético para evitar que absorba olores de otros alimentos.
Si necesitas conservarla por más tiempo, la mejor opción es congelarla. En ese caso, puede durar hasta 2 meses. Para almacenarla en el congelador, coloca la masa en un recipiente hermético o en una bolsa para congelador, y asegúrate de etiquetar con la fecha. Cuando quieras usar la mesa, déjala descongelar en la nevera durante la noche y mézclala bien antes de cocinarla para asegurar que la textura sea uniforme.